Funje (Funge)

Funje Funge – Montículo elástico parecido a la polenta hecho de yuca (funje de bombó) o maíz (funje de milho), que se come con casi todos los guisos.

El funje (también escrito Funge) es la suave y pegajosa papilla de yuca, base de muchas comidas angoleñas. Es similar a la polenta o al ugali, pero se elabora con harina de yuca (también llamada harina de yuca o farinha de mandioca). Bien preparado, el funje es suave, elástico y ligeramente ácido. Su sabor neutro complementa las salsas intensas de guisos como la Muamba de Galinha o el Calulu.

Estas gachas elásticas tienen profundas raíces en la cultura angoleña. La yuca llegó a Angola a través del comercio hace siglos y se convirtió en un cultivo básico. El funje se volvió esencial, especialmente en las zonas rurales, gracias a su prosperidad en el clima tropical. Hoy en día, casi todos los cocineros angoleños pueden preparar funje de memoria: vertiendo agua hirviendo en harina de yuca, removiendo hasta formar una masa y luego moldeándola a mano.

Un aspecto único del funje es su textura: es lo suficientemente firme como para mantener su forma (a menudo se forma una bola o un montículo), pero suave y ligeramente pegajosa al tacto. Esto lo hace ideal para comer con la mano: se toma un bocado, se le da forma de disco y luego se moja en guisos o salsas. La simplicidad del funje —solo agua, harina y una pizca de sal— oculta su importancia. Transforma sopas ligeras en una comida contundente y realza el sabor de cualquier acompañamiento.

En los hogares angoleños, el funje se suele preparar fresco y servir inmediatamente. Suele acompañar guisos para el almuerzo o la cena. Por ejemplo, un plato clásico es la Muamba de Galinha con una guarnición de funje. Dado que el funje es muy suave, los cocineros a veces lo enriquecen ligeramente con caldo de pescado o leche de coco para variar (una influencia de fusión de Brasil). Pero la versión de yuca pura es verdaderamente emblemática de la herencia angoleña: sencilla, nutritiva y reconfortante.

Funje (Funge) - Gachas de harina de yuca angoleña

Receta de Ayudante de viaje SPlato: GuarniciónCocina: angoleño, africanoDificultad: Fácil
Porciones

4

porciones
Tiempo de preparación

10

minutos
Tiempo de cocción

20

minutos
Calorías

280

kcal

Esta sencilla receta de funje (funga) muestra cómo convertir la harina de yuca en unas gachas elásticas. Se incorpora gradualmente agua hirviendo a la harina de yuca y la sal, batiendo hasta formar una masa suave. Luego, se amasa y se cuece suavemente a fuego lento hasta que se espesa y forma una bola cohesiva. El resultado es una bola de almidón brillante y suave, perfecta para acompañar guisos con salsa. Listo en unos 30 minutos, el funje es una guarnición sencilla y sin gluten que complementa cualquier plato angoleño.

Ingredientes

  • Harina de yuca: 2 tazas (aproximadamente 220 g) – También llamada harina de yuca. Es el ingrediente principal.

  • Agua: 4 tazas (1 litro), más si es necesario. Para cocinar. Puede sustituir la mitad del caldo de pescado o de pollo (para un sabor más intenso).

  • Sal: ½ cucharadita (o al gusto) – Realza el sabor suave.

  • 4 ingredientes

Instrucciones

  • Hervir agua: En una cacerola grande, hierva 4 tazas de agua con una pizca de sal. (Si lo desea, añada una hoja de laurel o un cubo de caldo de pescado para darle más sabor).

  • Mezclar la harina poco a poco: Coloque la harina de yuca en un tazón grande. Retire el agua hirviendo del fuego. Vierta gradualmente una pequeña cantidad (aproximadamente ½ taza) de agua caliente en la harina, batiendo enérgicamente con una cuchara de madera hasta formar una pasta suelta. Repita el proceso, añadiendo agua en incrementos de ½ taza y revolviendo constantemente para evitar grumos.

  • Combinar: Una vez que se haya incorporado toda el agua hirviendo y la mezcla esté demasiado espesa para remover, vuelva a poner la olla a fuego lento. Añada la pasta de harina al agua caliente restante.

  • Cocinar las gachas: A fuego muy lento, remueve y machaca la mezcla con una cuchara de madera durante unos 5 minutos. La pasta se espesará y se despegará de las paredes de la olla. Presiona y aplana la masa contra el fondo de vez en cuando para que se cocine uniformemente. (Ten cuidado, el funje puede salpicar al espesar).

  • Forma y frescor: Cuando las gachas estén brillantes y suaves, sin sabor a harina cruda (unos 20 minutos de cocción), retírelas del fuego. Moje sus manos con un poco de agua y forme el funje en una cúpula o panecillo redondo sobre un plato para servir. Déjelo enfriar un poco; la textura se endurecerá al enfriarse.

  • Atender: Arranque trozos de funje con las manos o con una cuchara y sumérjalos en guisos como Muamba de Galinha o Calulu.

Equipo necesario

  • Presentación y maridajes: Sirva siempre el funje caliente. Coloque el montoncito de funje junto al plato del guiso o forme bolitas individuales en cada plato. El funje absorbe bien la salsa, así que acompáñelo con guisos, estofados o platos de frijoles sabrosos. También combina bien con carnes o pescados a la parrilla. En Angola, un plato típico suele incluir funje, pescado o pollo a la parrilla y una guarnición de frijoles condimentados con aceite de palma.
  • Solución de problemas de consistencia: Consejos para evitar grumos: bata enérgicamente al añadir cada vertido de agua y deshaga los grumos inmediatamente. La mezcla debe tener la consistencia de una masa espesa para panqueques al añadir agua; luego, al calentarse, formará una masa firme. Si queda demasiado espesa, añada un poco más de agua tibia. Si queda espesa, cocine un poco más. La práctica hace al maestro: la masa debe quedar suave, pero no líquida.
  • Almacenamiento y recalentamiento: El funje se disfruta mejor fresco. Se endurecerá al enfriarse. Si es necesario, guarde las sobras tapadas en el refrigerador hasta por un día. Recaliéntelo rompiéndolo en trozos más pequeños y cocinándolo al vapor o en el microondas con un chorrito de agua; se ablandará. (Nota: El funje refrigerado se volverá muy firme y pastoso; es fundamental humedecerlo y calentarlo para recuperar su textura).
  • Variaciones y sustituciones: (1) Versión de maíz: En el sur de Angola, se prepara una versión amarilla llamada pirão, sustituyendo la harina de yuca por harina de maíz (fubá). El pirão tiene un sabor ligeramente más dulce y un color amarillo intenso. (2) Potenciador de sabor: Incorpore un poco de caldo de pescado, leche de coco o aceite vegetal durante la cocción para obtener más sabor y brillo. (3) Gachas más ligeras: Algunos prefieren una versión más suelta; aumente el agua a 5 tazas y reduzca la harina a 1½ tazas para obtener una textura suave similar a la polenta. (4) Funje fermentado: Para un toque ácido, remoje la harina de yuca brevemente en agua antes de cocinarla para que adquiera un toque ácido (tradicional en algunas regiones).
  • Consejos del chef: (•) Use la harina adecuada: No toda la harina de yuca sirve. Use harina de tapioca o harina de yuca finamente molida para funje (a veces se vende como "massava" o "garri"). Evite el almidón de yuca, ya que se apelmaza demasiado. (•) Control de temperatura: Mantenga el fuego bajo al cocinar la masa; el fuego alto puede hacer que las gachas se quemen o se peguen rápidamente. (•) Sin intervención: Una vez que la masa se forme, resista la tentación de revolver demasiado; darle forma y voltear suavemente distribuirá el calor. (•) Servicio inmediato: El funje se vuelve gomoso si se deja demasiado tiempo. Sírvalo justo después de darle forma, mientras esté suave.
  • Preparación anticipada: El funje no se puede preparar con horas de antelación; debe consumirse enseguida después de su cocción. Sin embargo, puede preparar agua hirviendo y harina en un bol con antelación. Luego, mezcle y cocine al momento de servir.
  • Utensilios necesarios: Cacerola u olla: Las de fondo grueso son ideales para un calor uniforme. Tazón: Para batir la harina de yuca con agua. Cuchara o espátula de madera: Para revolver enérgicamente sin rayar los utensilios. Batidor (opcional): Útil para mezclar el agua con la harina de manera uniforme.

Información nutricional

Nutritivo

Por ración

Calorías

210 kcal

Grasa total

0,5 gramos

• Grasas saturadas

0 gramos

Carbohidratos

50 gramos

• Fibra

4 gramos

• Azúcares

1 gramo

Proteína

0,4 gramos

Sodio

5 mg (muy bajo)

Alérgenos: Ninguno: naturalmente sin gluten, vegano y sin frutos secos.

 

Preguntas frecuentes

¿Qué son los hongos? El funje (también llamado fungi o mfunde) es una papilla tradicional angoleña que se prepara mezclando harina de yuca con agua hirviendo. Forma una masa espesa y elástica que los angoleños comen con los dedos, generalmente acompañada de guisos y salsas.

¿Puedo utilizar harina de maíz en lugar de harina de yuca? No exactamente. La versión de harina de maíz se llama papilla En Angola, se trata de un alimento básico diferente (gachas amarillas parecidas a la polenta). Para un funje auténtico, se necesita harina de yuca. La harina de maíz es un plato sabroso, pero la textura y el sabor son diferentes.

¿Funje no contiene gluten? Sí. La harina de yuca no contiene gluten. Funje es apto para dietas sensibles al gluten.

¿Cómo recalentar el funje? Recaliéntala al vapor o en el microondas con un poco de agua. Esto rehidratará y ablandará la masa. Removerla directamente en la estufa puede ser difícil una vez que esté cuajada.

¿Por qué mi funje tiene grumos? Se forman grumos si la harina no se incorpora rápidamente al agua. Siempre bata primero la harina con un poco de agua y luego remueva enérgicamente. Si se forman grumos, presiónelos contra el borde de la olla hasta que se disuelvan.

¿Con qué se come el funje? El funje casi siempre se sirve con un plato principal con salsa, como guisos de pollo, pescado o frijoles. Es el "cuerpo" neutro del plato el que acompaña las salsas picantes o intensas. En Angola, el funje y la moamba de galinha son un maridaje clásico.

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