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En Grecia, patatas fritas Son mucho más que simples papas fritas: son una obsesión nacional. Se trata de papas gruesas fritas en aceite de oliva virgen extra, bañadas con orégano griego de montaña y sal marina. Tradicionalmente, se preparan en casa en una sartén o sartén (raramente en una freidora), por lo que cada pieza se baña en aceite de oliva auténtico, lo que les da una textura crujiente y dorada, y un sabor fragante y afrutado que las papas fritas de la comida rápida no pueden igualar. El exterior queda deliciosamente crujiente, mientras que el interior se mantiene esponjoso y suave. Muchos griegos comparten historias de abuelas que manejaban la sartén con destreza, inclinándola para que las papas se cocinaran uniformemente en un charco poco profundo de aceite de oliva. De hecho, patatas fritas Son tan apreciados que la mayoría de las tabernas los sirven gratis junto con otros platos: los clientes los esperan tanto como esperan aceite de oliva o queso feta en la mesa.
Este humilde plato evoca recuerdos de cenas y platos de mezedes. Suelen acompañar platos como tortillas. souvlakio pescado a la parrilla, y son un acompañamiento esencial para cualquier guiso con salsa, ya que absorben los jugos restantes. Los lugareños pueden espolvorearlos con orégano y queso feta desmenuzado, un toque tradicional, o exprimir limón fresco por encima. El resultado es un plato reconfortante y hogareño que encarna la cocina mediterránea. A pesar de estar fritos, muchos griegos insisten en que el aceite de oliva no es "poco saludable" y destacan la reputación cardiosaludable de la dieta mediterránea. Con moderación, estas patatas fritas son un capricho ocasional que conserva la esencia de la cocina tradicional.
La técnica es clave para la perfección. TiganitasLas papas se cortan en gajos o palitos irregulares, hechos a mano, de aproximadamente 1 cm de grosor, más gruesos que las papas fritas típicas para que el interior permanezca tierno. Las papas cortadas se remojan en agua (un paso que a menudo se realiza durante al menos 30 minutos) para eliminar el almidón y lograr una textura más crujiente. Luego se fríen a fuego moderado: primero a una temperatura más alta para obtener color, luego se reduce para que se cocinen sin quemarse. Todo el proceso no se apresura; el objetivo es un tono dorado intenso con una suavidad algodonosa en el interior. Cuando se sirven, las papas fritas calientes se sazonan inmediatamente con sal en escamas y orégano aromático (a veces una mezcla de sal y orégano). Su sabor es simple pero profundo: la calidez afrutada del aceite de oliva, la dulzura de la papa y el perfume de las hierbas. Este plato es tan popular que un visitante estadounidense comentó una vez que las tabernas griegas también podrían llamarse "Casas de aceite de oliva y papas".
4
porciones10
minutos25
minutos380
kcal45
minutosEsta receta de Patates Tiganites da como resultado unas papas fritas griegas crujientes y doradas, fritas en aceite de oliva. Se remojan, se escurren y se fríen suavemente por tandas en un baño de aceite de oliva virgen extra. Controlando cuidadosamente la temperatura, cada pieza logra una corteza crujiente y un centro suave. Tras escurrirlas, se espolvorean con sal y orégano seco. Opcionalmente, se puede espolvorear con queso feta desmenuzado y un chorrito de limón para realzar su sabor. En aproximadamente una hora (principalmente el tiempo de remojo), se obtiene una sencilla guarnición griega: papas gajo calientes y aromáticas, irresistibles con carnes a la parrilla, huevos o como aperitivo.
2–3 patatas medianas (aproximadamente 1 a 1,5 libras en total) – pelado si se prefiere (aunque la tradición griega a menudo conserva la cáscara para darle textura y nutrición).
Agua para remojar. Llene un recipiente hasta cubrir las patatas cortadas.
Aceite de oliva para freír: Aproximadamente de ¼ a ½ taza (suficiente para cubrir aproximadamente 2,5 cm de profundidad en la sartén). Use aceite de oliva virgen extra de buena calidad para un sabor clásico.
Sal: ~1 cucharadita de sal (al gusto) tanto para remojar como para terminar.
Orégano seco: 1–2 cucharaditas, para espolvorear (preferiblemente griegas) vestido).
Guarniciones opcionales: Queso feta desmenuzado, rodajas de limón o un chorrito de zumo de limón fresco. (Son comunes en las tabernas, aunque la receta clásica solo lleva orégano y sal).
Preparar las patatas: Corte cada papa en trozos largos y gruesos (de aproximadamente 1 cm o ½ pulgada de grosor). No se preocupe por que queden uniformes; el aspecto rústico forma parte de su encanto. Coloque las papas cortadas en un recipiente con agua fría. Déjelas en remojo durante al menos 30-60 minutos (o incluso toda la noche en el refrigerador). El remojo elimina el exceso de almidón y evita que se peguen.
Escurrir y sazonar: Después de remojarlas, escúrralas y séquelas bien con papel de cocina limpio. Páselas a un bol. Mientras aún estén calientes, espolvoréelas generosamente con una pizca de sal (esto les da sabor por dentro y las deja crujientes). Remuévalas para que se impregnen bien.
Calentar el aceite: En una sartén o olla gruesa, lo suficientemente amplia como para que quepan las papas en una sola capa, vierta el aceite de oliva. Caliente a fuego medio hasta que el aceite esté muy caliente, pero sin humear (aproximadamente entre 160 y 170 °C, o hasta que una gota de agua chisporrotee al contacto).
Freír las patatas (primera etapa): Añade con cuidado los trozos de patata escurridos en una sola capa (trabaja por tandas si es necesario). Deberían chisporrotear al instante. Fríe durante unos 5 minutos, removiendo suavemente varias veces para que se doren uniformemente. El objetivo es que los bordes queden crujientes mientras el centro aún se está cocinando. Si los trozos se pegan, espera un poco antes de removerlos.
Freír (segunda etapa): Después de 5 minutos, baje un poco el fuego y siga friendo durante 5 minutos más, removiendo de vez en cuando. Luego, suba el fuego moderadamente y fría de 2 a 3 minutos más hasta que las papas estén bien doradas y crujientes por todas partes (un total de 12 a 15 minutos por tanda). Evite remover constantemente; deje que se doren antes de darles la vuelta.
Escurrir y sazonar nuevamente: Usa una espumadera o pinzas para pasar las papas fritas a un plato cubierto con papel absorbente. Espolvoréalas con un poco de sal extra mientras estén calientes. Puedes espolvorearlas ligeramente con orégano para que se adhieran. Si lo deseas, desmenuza un poco de queso feta por encima y añade un chorrito de jugo de limón o unas rodajas de limón aparte.
Servir caliente: Coloca las patatas fritas en una fuente y sirve inmediatamente. Tiganitas Se disfrutan mejor frescos y calientes.
Nutrición | Por porción (¼ de receta) |
Calorías | ~380 kcal |
Carbohidratos | ~40 gramos |
Proteína | ~4 gramos |
Gordo | ~22 gramos |
Fibra | ~3 gramos |
Sodio | ~300 mg (con sal) |
Alérgenos: Ninguno (naturalmente sin gluten, vegano) |
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