Galatopita — Pastel griego de crema pastelera

Galatopita — Pastel griego de crema pastelera

La galatopita (literalmente, "pastel de leche") es un postre griego puro y reconfortante. Imagine una crema pastelera cremosa sobre un pastel, pero sin capas de hojaldre. En cambio, el relleno forma una base aterciopelada, coronada por una corteza dorada y brillante. En Grecia, la galatopita se sirve con más frecuencia durante la Pascua y las celebraciones familiares, aunque sus sencillos ingredientes la convierten en un capricho para todo el año. Este dulce pastel proviene de la región del Peloponeso (y de Mani en particular), un lugar con fuertes vínculos con la vida pastoral. Se preparaba tradicionalmente en primavera, cuando abundaba la leche fresca, incluso leche de cabra u oveja en la antigüedad. De hecho, el nombre lo dice todo: gala significa leche y pita significa pastel.

La historia es profunda: aparecen referencias al pastel de leche en la literatura griega antigua (Aristófanes mencionó el "amis", una especie de pastel de leche) y en los libros de cocina bizantinos. Incluso tiene vínculos con Anatolia y los lidios. Pero independientemente de sus orígenes, la galatopita moderna es sencilla. Se cocina una crema pastelera al fuego con leche, azúcar, sémola fina, huevos, mantequilla y un toque de especias y cítricos. Una vez vertida en la sartén, se vierte una mezcla dulce de huevo y azúcar por encima, que se hornea formando una corteza brillante y ligeramente crujiente. El resultado es tierno y húmedo por debajo, con una superficie crujiente y azucarada.

Culturalmente, la galatopita transmite nostalgia. Muchos griegos recuerdan la comodidad de las cocinas de sus abuelas, donde el aroma a canela recién horneada y crema pastelera con toques de limón impregnaba el aire. A menudo se sirve sencilla, espolvoreada con canela o con un chorrito de almíbar ligero o miel, y se disfruta con café, leche o vino de postre. A diferencia de su primo más famoso, el galaktoboureko (que lleva capas de pasta filo y se empapa en almíbar), la galatopita es sencilla: sin glaseado de almíbar ni una masa delicada. Su atractivo reside en su centro cremoso y cremoso, y en su facilidad de preparación.

Hoy en día, la galatopita sigue siendo apreciada por su modesta exquisitez. Es especialmente popular en la Pascua griega, pero muchos hogares también la preparan en Año Nuevo o en cualquier ocasión en que se desee un dulce y nostálgico postre. La crema pastelera se endurece, pero aún se mueve un poco, por lo que una rebanada mantiene su forma y se siente casi suave como una almohada al paladar. Ya sea caliente o recién sacada del refrigerador, ofrece una dulzura suave y una calidez hogareña. Como postre de chef, es indulgente y confiable: un testimonio de cómo ingredientes simples (leche, azúcar, huevos, sémola) pueden dar lugar a algo especial.

Galatopita (pastel de leche griego) – Tarta de crema pastelera

Receta de Ayudante de viaje SPlato: Postre, pastel de crema pasteleraCocina: GriegoDificultad: Moderado
Porciones

8

porciones
Tiempo de preparación

15

minutos
Tiempo de cocción

50

minutos
Calorías

210

kcal
Tiempo de enfriamiento

20

minutos

La galatopita es un pastel griego de crema pastelera, horneado sin masa filo. El relleno se prepara cocinando leche, azúcar y sémola en la estufa hasta que espese, y luego se le añaden huevos para darle más cuerpo. Se vierte en una sartén y se cubre con una ligera mezcla de huevo, azúcar, mantequilla y canela, formando una corteza dorada. Al hornearlo, se obtiene un postre con un interior suave, casi como un pudín, y una superficie crujiente y azucarada. El pastel terminado es ligeramente dulce, con notas cálidas de vainilla, ralladura de limón y canela, lo que lo convierte en un postre reconfortante y tradicional.

Ingredientes

  • Relleno de natillas
  • 8 tazas (2 litros) de leche entera – la base cremosa de la crema pastelera. (Con la masa entera, el pastel queda más cremoso; puedes usar una base al 2% o una mezcla, pero quedará más ligero).

  • 1 taza (200 g) de azúcar granulada – Endulza las natillas. (Tradicionalmente, el azúcar se puede sustituir por 1/2 taza de miel, que se añade a la leche mientras se calienta).

  • 3 tazas (500 g) de sémola fina (crema de trigo) – Espesa la leche hasta formar una crema pastelera. (La sémola es clave para la textura; si no está disponible, una mezcla de ¼ de taza de maicena y ¼ de taza de harina puede sustituir parcialmente la crema, pero el sabor y la consistencia serán diferentes).

  • 4 huevos grandes Batido a temperatura ambiente. Proporciona estructura y una textura suave y rica.

  • 3 cucharadas (42 g) de mantequilla sin sal – mezclado con las natillas para darle una textura sedosa.

  • 2 cucharaditas de extracto de vainilla o azúcar de vainilla – por su suave dulzura y aroma.

  • 2 cucharaditas de ralladura de limón – realza el sabor.

  • Una pizca de sal – equilibra el dulzor.

  • canela molida – 1½ cucharaditas; se utiliza tanto en el relleno como en la cobertura para dar calor.

  • Cobertura (mezcla para la corteza)
  • 1 huevo grande (batido) – forma la costra de azúcar cuando se hornea.

  • 2 cucharadas (28 g) de mantequilla derretida – para riqueza y brillo.

  • 2 cucharadas (30 ml) de agua – ayuda a esparcir la cobertura.

  • ¼ de taza (50 g) de azúcar granulada – endulza la corteza.

  • 1½ cucharaditas de canela molida – crujiente especiado.

Instrucciones

  • Precalentar el horno: Calentar a 180 °C (350 °F) con una rejilla en el centro. Dejar al menos 10 minutos para que alcance la temperatura.

  • Calentar la leche: En una olla grande y profunda a fuego medio, vierta la leche. Incorpore el azúcar, la sal, la vainilla y 2 cucharaditas de canela. Caliente suavemente, revolviendo, hasta que el azúcar se disuelva y la leche empiece a humear (sin que hierva), aproximadamente. 5 minutos.

  • Cocer la sémola: Reduce el fuego a bajo. Incorpora poco a poco la sémola y la ralladura de limón, batiendo constantemente para evitar grumos. Cocina durante unos 4-5 minutos, removiendo constantemente. La mezcla espesará y pasará de un blanco lechoso a una crema pálida. Continúa cocinando hasta que ya no esté líquida.

  • Natillas terminadas: Retire del fuego y añada las 3 cucharadas de mantequilla. Deje reposar 10 minutos para que se enfríe un poco. (Esto evita que se corte al añadir los huevos).

  • Incorporar los huevos: Batir los 4 huevos en un bol. Incorporar lentamente los huevos batidos a la crema pastelera caliente, removiendo durante 2 minutos hasta que se integren por completo. La mezcla debe quedar espesa y cremosa.

  • Engrasar el molde y verter: Unte con mantequilla un molde de 20x20 cm o similar. Vierta con cuidado el relleno de crema pastelera, alisando la superficie con una espátula.

  • Preparar la cobertura: En un tazón pequeño aparte, bata el huevo para la cobertura, 2 cucharadas de mantequilla derretida, 2 cucharadas de agua, ¼ de taza de azúcar y la ½ cucharadita de canela restante. La mezcla quedará líquida.

  • Terminar el pastel: Vierta la mezcla de cobertura uniformemente sobre el relleno. (No revuelva; debe flotar). Use una cuchara para distribuirla de manera que cubra casi toda la superficie. Un efecto marmolado queda perfecto.

  • Hornear: Coloque el molde en la rejilla central del horno. Hornee durante 45-50 minutos hasta que la superficie esté dorada y ligeramente cristalina. (No subirá mucho). Compruebe presionando suavemente el centro: debe estar firme, no tembloroso. Si tiene dudas, hornee 5 minutos más.

  • Fresco: Retira del horno y deja enfriar la galatopita a temperatura ambiente al menos 15-20 minutos (o más). El centro se endurecerá más al enfriarse. Puedes servirla tibia, a temperatura ambiente o fría, según prefieras.

Consejos, presentaciones y variaciones

  • Presentación y maridajes: Corte la galatopita en gajos. Espolvoree con canela molida extra o una pizca de azúcar glas justo antes de servir. Está deliciosa sola o acompañada de una cucharada de crema batida o una cucharada de yogur griego. Tradicionalmente, se suele acompañar con café griego o un vaso de leche fría. En casas y tabernas, la encontrará con frecuencia en la mesa de postres después de una comida festiva. Sírvala caliente recién salida del horno para un toque reconfortante o fría como postre de verano. También combina bien con un chorrito de miel o una cucharada de compota (de cereza o de higos, por ejemplo) para complementar su suave dulzor.
  • Almacenamiento y recalentamiento: Cubra las sobras y conserve la galatopita en el refrigerador hasta por 4 o 5 días. La textura se volverá más cremosa y firme. Para recalentar, caliente rebanadas individuales en el microondas durante 15-20 segundos o en un horno a 160 °C (325 °F) durante unos minutos; esto reaviva la corteza dorada y suaviza un poco el centro. El pastel también se puede congelar: envuélvalo bien y congélelo hasta por 1 mes; descongélelo en el refrigerador durante la noche antes de cortarlo. Tenga en cuenta que las natillas de sémola absorben la humedad con el tiempo, pero bien selladas se conservan bien.
  • Variaciones y sustituciones: - Con filo: Para una versión más rica, forre el molde con 2 o 3 hojas de filo con mantequilla antes de verter las natillas, convirtiéndola en una tarta estilo galaktoboureko. - Sin gluten: Reemplace la sémola con maicena o harina de arroz (aproximadamente ¼ de taza de cada una) y agregue un huevo extra para ayudar a cuajar. El sabor será ligeramente diferente (menos a trigo). - Vegano/sin lácteos: Use leche de almendras o avena sin azúcar y sustituya cada huevo con 3 cucharadas de puré de manzana sin azúcar o un sustituto de huevo comercial. Aumente la maicena en 1 o 2 cucharadas para ayudar a espesar. - Toque de sabor: Agregue 1 o 2 cucharaditas de agua de azahar o una pizca de nuez moscada a las natillas. Cambie la ralladura de limón por ralladura de naranja para una nota cítrica diferente. - Mejora la textura: Añade un puñado de pasas o nueces picadas (nueces o almendras) después del paso 3, o espolvoréalas sobre el relleno antes de hornear. Esto le da un toque crujiente y atractivo visual.
  • Consejos del chef: - Remover con frecuencia: Al cocinar leche y sémola, remover constantemente evita que se pegue y garantiza una crema pastelera suave. Una espátula de silicona o una cuchara de madera funcionan bien. - Enfriar antes de los huevos: Como se indicó, deje que la mezcla se enfríe brevemente antes de agregar los huevos. Esto ayuda a evitar que los huevos se revuelvan o formen cuajada. - Rebanada afilada: Use un cuchillo de hoja fina para cortar gajos limpios. Limpie el cuchillo entre cortes si la crema pastelera está muy cuajada. - Grosor uniforme: Vierta el relleno en un molde donde tenga aproximadamente 2-3 cm (¾-1 pulgada) de grosor. Un molde más pequeño rinde una tarta más gruesa; ajuste el tiempo de horneado si usa un molde mucho más grande o más pequeño.
  • Ingredientes adicionales: - Lista de la compra: Harina de sémola; canela griega; extracto de vainilla; especias opcionales para la cobertura (ralladura de cítricos, nueces picadas). - Preparación: La crema pastelera se puede preparar hasta con 1 día de anticipación. Después de cocinarla y mezclarla con los huevos, viértala en el molde, cúbrala y consérvela en el refrigerador. Antes de servir, agregue la mezcla para la cobertura y hornee según las instrucciones.
  • Recetas relacionadas: Si te encantan estas natillas sencillas, prueba el galaktoboureko griego (natillas horneadas en masa filo con almíbar) o la bougatsa (natillas dulces de sémola en masa filo). Otros postres lácteos incluyen el rizogalo (arroz con leche griego) y la kastanopita (pastel de castañas con natillas).
  • Utensilios necesarios: Cacerola o olla grande para cocinar el relleno de crema. Una olla pesada es ideal para un calentamiento uniforme. Batidor de varillas para disolver el azúcar y remover la sémola sin grumos. Tazón para batir los huevos. Molde para hornear de 20x20 cm (8x8 pulgadas) de metal o vidrio. (Para un pastel más grueso, use un molde un poco más pequeño). Engrase bien el molde con mantequilla o spray para hornear. Tazas y cucharas medidoras para obtener las cantidades exactas. Cuchillo y tabla de cortar para cortar el pastel horneado.

Información nutricional (por 1 rebanada, ~100 g)

Calorías

Carbohidratos

Proteína

Gordo

Fibra

Sodio

Alérgenos

210

36 gramos

7 gramos

6 gramos

0,5 gramos

30 mg

Contiene: gluten, huevos, lácteos (leche, mantequilla)

Un pastel moderadamente dulce: la mayoría de las calorías provienen de la leche y el azúcar.

8 de agosto de 2024

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