En la isla de Pag, el cordero no es una proteína más; es el pilar de la mesa en un lugar donde la roca, el viento y el mar marcan el ritmo de la vida diaria. Paška janjetina se refiere a la carne fresca de corderos lechales de la raza local de Pag, criados exclusivamente en la isla y con denominación de origen protegida en la Unión Europea. Estos corderos pastan en un terreno kárstico disperso, entre arbustos bajos y plantas resistentes y aromáticas, mientras el fuerte viento bura arrastra la brisa marina sobre los pastos. Esta combinación recubre la salvia, la siempreviva y otras hierbas silvestres con una fina capa de sal, y ese carácter mineral y herbáceo se transmite directamente a la carne.
El resultado es un cordero que los cocineros describen como pálido, tierno y de sabor suave, en lugar de un sabor a caza intenso. Los escritores gastronómicos independientes y las guías de referencia suelen incluir el Paška janjetina entre los corderos más preciados de Croacia, destacando su delicada cobertura de grasa y su sutil toque de hierbas. Sin embargo, para los locales, la atención se centra menos en las clasificaciones y más en las ocasiones: almuerzos de Pascua, festividades de santos, bodas y las largas reuniones de verano cuando la familia regresa a la isla. En esos días, el cordero se presenta en diversas presentaciones, desde animales enteros girando lentamente en el asador (janjetina na ražnju) hasta cortes a la parrilla sellados al fuego de leña (janjetina na gradele).
Otro método célebre en Dalmacia y Pag es el ispod peke: cordero asado en una sartén poco profunda bajo una tapa pesada con forma de campana que reposa directamente sobre las brasas. Bajo esta tapa, el cordero, las patatas y las verduras se asan y estofan a la vez, bañados en aceite de oliva, vino y sus propios jugos, hasta que la carne se ablanda y las patatas absorben hasta la última gota de sabor. El peka tradicional requiere un hogar de leña y práctica en el manejo de brasas, lo que lo hace inaccesible para muchos cocineros caseros. Las adaptaciones modernas utilizan una olla holandesa o una asadera profunda en un horno doméstico, imitando el ambiente cerrado con una tapa hermética o papel de aluminio.
Esta receta de Paška Janjetina (Cordero Asado con Hierbas de la Isla de Pag) sigue el mismo método de cocción al horno. El cordero se marina con aceite de oliva, ajo, salvia, romero y ralladura de limón, evocando los pastos de la isla donde pastan los animales. La carne se asa sobre una generosa capa de patatas, cebollas y zanahorias, con vino blanco y caldo que aportan una suave humedad. La primera fase se cocina tapado a temperatura moderada, para que el cordero se relaje y las verduras adquieran un sabor intenso. La fase final se realiza destapado a fuego alto, dejando la piel crujiente y los bordes de las patatas caramelizados. Una temperatura interna ideal de entre 80 y 85 °C (176 y 185 °F) proporciona la textura tierna, casi desmenuzable, característica del cordero asado durante mucho tiempo en platos estilo peka.
El cordero de Pag y el Paški sir (el famoso queso de oveja de la isla) pueden ser difíciles de encontrar fuera de Croacia, pero la estructura del plato es muy atractiva. Una pierna o paletilla de cordero joven de buena calidad es un acompañamiento ideal, y cualquier queso de oveja curado, firme y ligeramente salado, puede servir como guarnición. Este método es ideal para comidas festivas, pero una vez en el horno, el trabajo consiste principalmente en una paciente espera y una breve comprobación al final.
Servida al estilo familiar en la asadera, Paška Janjetina trae un trocito del paisaje pedregoso de Pag al interior: cordero crujiente, patatas tiernas impregnadas del jugo de la sartén y la sutil y resinosa línea de hierbas mediterráneas. Una sencilla ensalada verde, pan crujiente y quizás unas virutas de queso de oveja duro completan una comida con un aire arraigado a la tierra, pero a la vez manejable en una cocina común.